En un mundo donde el cambio es constante, las empresas también se ven obligadas a la transformación. Implementar estrategias de diversificación empresarial es una de las respuestas de las organizaciones ante el progreso de su negocio.
Aunque también, la diversificación puede manifestarse como una reacción ante un nuevo paradigma de mercado, el cual impulsa a los negocios a tomar decisiones y abrirse a posibilidades alternativas.
En las siguientes líneas conocerás, entonces, qué es la diversificación empresarial, qué tipos existen y qué implica.
¿Qué son las estrategias de diversificación empresarial?
La diversificación empresarial es una estrategia enfocada en la creación de nuevos mercados para ofrecer un producto diferente al definido por la empresa desde su creación hasta la fecha. Es decir, consiste en buscar nuevas oportunidades en lugares no explorados anteriormente.
En este sentido, diversificación es sinónimo de expansión, crecimiento, inversión y apertura. Generalmente, las empresas que apuestan a esta estrategia buscan nuevos nichos de mercado o posibilidades comerciales.
Las motivaciones pueden ser diversas, desde las oportunidades de crecimiento corporativo hasta la puesta en marcha de planes de reestructuración interna.
¿Cómo funciona la diversificación en tu negocio?
Para llevar a cabo una estrategia de diversificación, primero se precisa analizar el negocio para conocer tanto la situación actual como la potencial. Luego, tomando en cuenta esto, se puede planificar, ya que armar un modelo de negocio enfocado en diversificación es crucial.
La diversificación tiene que estar justificada por un análisis previo de la situación y plasmarse en un plan específico. Este debe describir la manera en que se aplicará tal operación.
Es vital, además, investigar con anticipación los nuevos mercados en los que se desea incursionar. De esta manera, se puede prever la reacción de los clientes y de los mercados ante los nuevos productos o servicios.
Al diversificar es preciso enfocarse en aquellas zonas de los espectros comerciales que se encuentran fuera del alcance de las empresas y que suponen una oportunidad de negocio. Por eso, la diversificación empresarial puede adquirir matices muy diferentes, según el objetivo estratégico que se persiga.
En fin, existen dos opciones para que las empresas pongan en marcha un plan de diversificación:
- Realizar una inversión propia para llegar a un espectro comercial nuevo o capturar a un grupo específico de clientes.
- Adquirir total o parcialmente otra empresa de un sector complementario o distinto al de la empresa que realiza la compra. En este caso, el capital se diversifica independientemente de si las marcas se fusionan o no.
Tipos de Estrategias de Diversificación Empresarial
Las dos principales clases de diversificación que existen en función de la actividad comercial son la diversificación relacionada y la no relacionada. Y, según las posibilidades económicas de la empresa: la diversificación por inversión propia y la diversificación de adquisición total o parcial de una empresa.
Pero, ¿de qué trata cada una?
Diversificación relacionada.
Esta estrategia se presenta cuando el objetivo es encontrar productos o servicios que tengan relación entre sí, ya sea porque son similares o porque comparten algo a nivel tecnológico, productivo o comercial.
En otras palabras, la diversificación relacionada busca combinar dos o más actividades que guarden algún tipo de relación. Lo esencial es que las dos acciones den mejores resultados que los que darían por separado.
Diversificación no relacionada.
Esta táctica se aplica cuando las nuevas actividades no tienen relación alguna con las de la empresa. En este caso, los nuevos espectros comerciales por los que apuestan las empresas son completamente nuevas para su filosofía. No guardan ninguna relación con los productos o servicios que ha ofrecido hasta el momento.
En consecuencia, las operaciones de diversificación no relacionada suponen un mayor nivel de riesgo, aunque quienes las llevan a cabo tienen el capital y los recursos suficientes para mitigarlos.
Diversificación por inversión propia.
En este caso, es la misma empresa quien invierte los propios recursos para crear productos que abrirán la puerta a un nuevo mercado. Este tipo de diversificación da mayor independencia para la producción y las ganancias, aunque implica una inversión inicial considerable.
Diversificación de adquisición total o parcial de una empresa.
Esta operación no consiste en fundar sino en adquirir una empresa más pequeña para que cumpla con las nuevas necesidades de producción. Una de las principales ventajas de esta diversificación es que se suma la experiencia del nuevo integrante y hasta su buena reputación, en caso de tenerla.
Estrategias de Diversificación Empresarial: ejemplos reales de quienes las usan
A continuación, conoce algunos de los ejemplos más inspiradores de diversificación empresarial.
- Apple, como ya es sabido, tiene como nicho principal las computadoras, las cuales llevaron el software y hardware al máximo nivel. A partir de allí, desarrollaron un ecosistema en torno de la alta tecnología con productos como iPads, iPods, iPhones, Apple Watches, accesorios y programas de televisión.
Esta marca es un excelente ejemplo de cómo expandir las posibilidades dentro una misma área.
- Disney es un claro ejemplo de diversificación masiva, con incontables líneas de productos y servicios: desde el ocio y el entretenimiento, hasta la hotelería. Esta empresa se mueve por áreas de negocio completamente diferentes entre sí, pero todas basadas y dirigidas hacia la misma marca.
- Bimbo se destaca por su capacidad de adaptación a los mercados de diferentes países. Su diversificación se basa en crear nuevos productos del mismo ramo para cada región en conjunto con empresas locales.
- Uber, a partir del concepto de transporte solicitado desde el teléfono móvil, buscó ampliar los servicios y así, atraer a más personas que requieran comida o productos a domicilio. Todo con la misma infraestructura ya existente: su aplicación móvil y los coches de sus socios conductores.
- Armani, si bien ya se había posicionado dentro de las mejores en su sector, decidió aventurarse en nuevas industrias ofreciendo más productos y servicios a sus clientes. Es el claro ejemplo de una estrategia de diversificación conglomerada.
Todavía hay más
La diversificación por conglomerado es una estrategia de crecimiento que implica agregar nuevos productos o servicios significativamente diferentes de los productos o servicios actuales de la organización.
- Netflix, es ejemplo de la estrategia de diversificación vertical: comenzó como distribuidor y una vez conocida la industria creó sus propios productos. Pasó a ser productor de series, documentales y películas.
- Starbucks, la marca de café, comenzó siendo proveedor, para después vender directamente a los clientes. Luego, se dedicó también, a crear nuevas preparaciones, espacios súper cómodos y servicios personalizados al cliente.
Por Qué Usar Estrategias de Diversificación Empresarial
Las ventajas que la diversificación le ofrece a las empresas son variadas. Entre todas ellas se destacan:
- Reduce riesgos. Si se tiene diferentes actividades en el negocio, se reduce la oportunidad de que todas ellas no resulten.
- Crea sinergias. Al diversificar el negocio, el talento y experiencia de otros sectores, también pueden generar valor. Además, si se ayuda a crear más empleos, se está ofreciendo una mejor oferta en el mercado y, en consecuencia, se obtienen mayores ganancias.
- Evita la saturación de mercados. Un nuevo producto representa una nueva oportunidad para un mercado antes ignorado.
- Introduce a nuevos mercados. Aumenta las posibilidades de negocio y también los beneficios económicos.
- Aprovecha recursos. Sacan todo el provecho a los recursos productivos.
- Mayor presencia de las marcas. Al ingresar en espectros comerciales a los que hasta entonces no se había accedido, se gana en presencia. Luego, si los resultados son los esperados, se consolida el posicionamiento en el nuevo mercado.
Conclusiones sobre las Estrategias de Diversificación Empresarial
La diversificación es una de las mejores estrategias para impulsar los planes de expansión. La causa es sencilla, permite aprovechar tu potencial para atender otro tipo de demandas y dirigirse a nuevos consumidores.
La diversificación también es una buena oportunidad de reinvención, de sumar ofertas de valor donde no las hay y, al mismo tiempo, aumentar el alcance del negocio. No debe olvidarse, además, que todo crecimiento necesita herramientas tecnológicas especializadas que favorezcan un equipo bien gestionado y comunicado.
Finalmente, para que una estrategia de diversificación sea completa, el equipo de ventas y de marketing digital deben cumplir con las expectativas de los clientes. Debe pensarse la forma en que el sitio web va a reflejar la expansión de la oferta de productos y servicios a los nuevos clientes, siempre conservando la calidad de servicio.
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